ECONOMÍA DOMINICANA REGISTRA CRECIMIENTO INTERANUAL DE 2.2 % EN ENERO DE 2025
El Banco Central de la República Dominicana (BCRD) ha publicado los resultados preliminares de la actividad económica en enero de 2025, y los datos sorprenden por sus contrastes. A pesar de un crecimiento interanual del Indicador Mensual de Actividad Económica (IMAE) del 2.2 %, la economía dominicana enfrenta retos importantes, especialmente en el sector de la construcción y la minería, mientras que otras áreas, como la intermediación financiera y la agropecuaria, muestran un dinamismo notable.
El sector agropecuario registró un crecimiento interanual de 4.7 %, impulsado por un aumento en la producción de plátano, guineo, aguacate, huevos y pollo. Este crecimiento ha sido respaldado por el apoyo técnico y financiero del Gobierno, consolidando la seguridad alimentaria del país.
Asimismo, la manufactura de zonas francas creció un 3.9 %, mientras que la manufactura local alcanzó un 3.2 %, consolidando su papel en la economía. En el sector servicios, el crecimiento del 3.1 % se debe en gran medida al buen desempeño de los servicios financieros (8.1 %), hoteles, bares y restaurantes (5.5 %), transporte y almacenamiento (4.5 %) y telecomunicaciones (4.4 %).
Uno de los datos más llamativos es el crecimiento interanual de la intermediación financiera, con un 8.1 %, reflejando la expansión del crédito privado en un 12.9 % respecto a enero de 2024. Este aumento, equivalente a RD$264 mil millones, muestra un dinamismo financiero clave para la economía dominicana.
A pesar del crecimiento general, el sector construcción registró una preocupante caída del -7.3 %. La política monetaria restrictiva en EE. UU., que ha mantenido tasas de interés elevadas, ha encarecido el financiamiento, afectando la inversión privada y la ejecución de proyectos de infraestructura. Además, el gasto de capital del Gobierno se mantiene por debajo del promedio histórico, cerrando el 2024 en 2.45 % del PIB, lo que también ha impactado la demanda de insumos de construcción.
La minería, por su parte, cayó un -1.8 %, a pesar del alto precio del oro en los mercados internacionales. La ralentización en la extracción de oro y plata, junto con conflictos entre comunidades locales y empresas mineras, ha generado un freno en la producción del sector.
El sector turístico sigue creciendo, pero a un ritmo más moderado. En enero, la llegada de extranjeros no residentes creció solo un 1.2 %, arrastrada por una reducción en la llegada de turistas desde EE. UU. (-5.1 %) y Canadá (-4.8 %), los principales emisores de turistas hacia el país. No obstante, el crecimiento del 5.5 % en el valor agregado del sector de hoteles, bares y restaurantes se vio impulsado por una mayor demanda de servicios de alimentos y bebidas.
El contexto global sigue siendo desafiante. La apreciación del dólar, las tensiones geopolíticas y los cambios en la política arancelaria de EE. UU. continúan generando incertidumbre. En este entorno, la República Dominicana debe apostar por fortalecer la inversión, diversificar su economía y mejorar la competitividad para enfrentar los retos que se avecinan.