Foro Económico Mundial 2025: Colaboración e Innovación Tecnológica para un Futuro Sostenible
El Foro Económico Mundial (WEF) celebra su tradicional encuentro anual en Davos, Suiza, del 20 al 24 de enero, reuniendo a líderes de gobiernos, empresas y organizaciones civiles. Este espacio busca trazar estrategias para enfrentar los desafíos más urgentes a nivel global, alineándose este año bajo el lema "Colaboración para la Era Inteligente", con un enfoque en prioridades clave: reconstruir la confianza, fomentar el crecimiento sostenible, proteger el planeta, transformar industrias e invertir en las personas.
Lo que diferencia a Davos de otros encuentros es su perspectiva integradora y multidimensional. Más allá de la geopolítica, el cambio climático o los avances tecnológicos, el foro ofrece un espacio único para abordar problemas globales interconectados, promoviendo la cooperación internacional como base para el progreso económico y social.
En esta edición, la inteligencia artificial (IA) ocupa un lugar central. De acuerdo con Mirek Dusek, director general del WEF, aunque la IA tiene el potencial de solucionar numerosos problemas globales, su desarrollo debe ir acompañado de estándares éticos y regulaciones claras. Iniciativas como GAIA-X, un proyecto europeo que asegura el intercambio de datos bajo estrictas normativas, reflejan el compromiso de aprovechar esta tecnología en sectores como la salud, las finanzas y la movilidad, sin comprometer la seguridad ni la privacidad.
La IA también se perfila como una herramienta clave para optimizar cadenas de suministro, reducir el desperdicio y mejorar la eficiencia energética. Desde algoritmos que minimizan el uso de recursos hasta sistemas avanzados de producción, estas soluciones tecnológicas permiten combinar el progreso económico con la protección ambiental.
El foro subraya también la importancia del comercio digital frente al proteccionismo creciente en algunas naciones. La Organización Mundial del Comercio (OMC) ha destacado que la digitalización puede ser clave para cerrar brechas de desarrollo entre países, aunque esto requerirá inversiones sustanciales en infraestructura tecnológica. Con un déficit proyectado de 15 billones de dólares para 2040, la necesidad de priorizar redes digitales y sostenibles es más urgente que nunca.
Además, la transición hacia una economía verde se posiciona como un tema crítico. Expertos destacan que innovaciones como la bioeconomía —un mercado que podría alcanzar los 30 billones de dólares para 2030— y la economía circular podrían ser esenciales para reducir el consumo de recursos no renovables, impulsando el crecimiento económico de manera responsable.
El Foro Económico Mundial 2025 reafirma que, en un mundo cada vez más interconectado, la confianza, la colaboración y el aprovechamiento ético de las tecnologías son esenciales para construir un futuro inclusivo y sostenible.