AUMENTO SOSTENIDO EN EL ROL DE LAS MUJERES EN LAS FINANZAS EN REPUBLICA DOMINICANA
En un análisis reciente sobre la participación de género en el sistema financiero dominicano, se revela un crecimiento constante en la población femenina que accede a créditos formales. Entre los años 2017 y 2022, se registró un aumento anual del 2.9%, una cifra significativa que destaca el progreso en este ámbito.
Los datos, presentados en el informe "Hacia un sistema financiero inclusivo y sostenible" de la Superintendencia de Bancos (SB), revelan una tendencia alentadora: las mujeres representan el 49% de los deudores únicos en el sistema financiero, con un índice de morosidad del 1.43%, inferior al de los hombres, situado en un 2.05% hasta julio de 2023.
Aunque existe una disparidad en el monto adeudado entre géneros, donde las mujeres concentran el 33% del total, el aumento en la participación femenina en créditos formales es notable, superando el crecimiento masculino que se sitúa en un 1.5% anual en el mismo período.
En cuanto a la inclusión en cuentas de ahorro, se observa una equidad de género, con una participación equitativa del 50/50, según las entidades financieras encuestadas.
El informe también destaca las iniciativas enfocadas en género dentro del sector financiero. El 44% de las entidades de intermediación financiera tiene políticas de igualdad de género y ofrece productos y servicios específicamente diseñados para mujeres. Además, se señala que el 20% de estas entidades asigna recursos anuales para impulsar estas iniciativas, un porcentaje que se eleva al 44% en el caso de los bancos múltiples.
Además, el informe resalta la importancia de la capacitación del personal para detectar signos de violencia financiera, donde el 11% de las entidades reporta contar con personal especializado en esta área. También se destaca la existencia del 38% de entidades que han establecido áreas de lactancia, principalmente en sus sedes principales, para el uso exclusivo de empleadas y en algunos casos compartidas con las usuarias.
Al adentrarse en el perfil socioeconómico de las mujeres encuestadas, se identifica un dato interesante: aunque el 32% tiene educación universitaria (superando al 23% de hombres con el mismo nivel educativo), hay un mayor porcentaje de mujeres con ingresos bajos. El 60% de ellas registra ingresos inferiores a RD$15,000 mensuales, mientras que en los hombres este porcentaje desciende al 36%.
Asimismo, se destaca que el 11% de las mujeres encuestadas reporta ingresos mensuales superiores a los RD$31,000, en comparación con el 21% de hombres con ingresos similares.
Un aspecto que resalta es la discrepancia en el porcentaje de mujeres que indican no trabajar, casi el doble que los hombres (28% frente al 15%). Esta diferencia se atribuye principalmente a la responsabilidad asumida por las mujeres en las labores domésticas y el cuidado familiar.
Entre las mujeres que trabajan fuera del hogar, se observa una preponderancia en actividades comerciales (12%), seguidas por la enseñanza y actividades relacionadas con la agricultura, ambas con un 6%, reflejando una diversidad de roles desempeñados por las mujeres en el ámbito laboral.